¿Cómo olvidar los días grises, si son ellos los que me traen el brillo del sol?
¿Cómo olvidar las derrotas; si son ellas las que me proporcionan las victorias?
¿Cómo olvidar los errores; si son ellos los que me dan las lecciones?
¿Cómo olvidar la soledad; si fue ella quién me hizo entender mis amores y me trajo a mis amigos?
¿Cómo olvidar las tristezas; si ellas hicieron que mi suerte cambiara?
¿Cómo olvidar los planes fracasados; si el fracaso me puede enseñar a soñar?
Todo al final se acomoda siempre, si todavía no sucedió, es porque no llegó el momento, pero llegará...
No hay comentarios:
Publicar un comentario